Pasta a la vodka AranCooks

Yo amo comer en la calle. De verdad. Pero entre lo caro que está todo y el hecho de que la mayoría de las veces tengo mejor comida en mi casa... últimamente prefiero resolver con lo que tengo. Y si me preguntan a mí, la pasta a la vodka está en el top 3 de pastas que puedes hacer increíble sin salir de tu cocina.
Solo necesitas:
una cebolla, ajo, un montón de pasta de tomate,
un chorrito no tan -ito de vodka pa’ soltar lo malo,
y crema de leche con queso parmesano para pegarlo todo otra vez.
¿La clave? Caramelizar bien esa pasta de tomate y no tenerle miedo al vodka (que sí, se evapora). El toque final es el agüita de cocción de la pasta, que es oro líquido para lograr esa salsa cremosa que se agarra al fideo como debe ser. Cuando la termines solo debes sentarte a comer como si alguien más fregara después... pero con la satisfacción de saber que lo hiciste tú.
Pero Arantxa… ¿y el vodka?
Sí, esta receta lleva vodka de verdad, y no es solo por la chercha. El alcohol ayuda a que la pasta de tomate y la crema se unan de una forma más sedosa y profunda, intensificando el sabor sin que sepa a licor. El vodka se evapora al cocinarlo, así que lo que queda es una salsa con cuerpo y un sabor redondito que no se logra igual sin él.
¿Que si puedes sustituirlo? Técnicamente sí: podrías usar un poquito de caldo o agua con un chorrito de limón para imitar el efecto... pero la verdad, no será lo mismo. Esta es una de esas recetas donde el ingrediente principal tiene su razón de ser. Así que si tienes un traguito guardado por ahí, este es el momento de ponerlo a cocinar en vez de beberlo. 😉
Ingredientes:
1 libra de pasta (preferiblemente corta), cocinada al dente
1 taza del agua en que se cocinó la pasta (¡guárdala!)
1 cda de aceite de oliva
1 cebolla mediana, picadita chiquita
4 dientes de ajo, picaditos
1 taza (8 oz) de pasta de tomate
¼ a ½ cdta de hojuelas de pimienta roja (según tu gusto al picante)
½ taza (4 oz) de vodka
1 ½ tazas de crema de leche
4 oz de queso parmesano rallado
Albahaca picada para terminar
Cómo se hace:
En una sartén grande, calienta 1 cda de aceite de oliva a fuego medio y sofríe 1 cebolla mediana picadita por unos 5 minutos, hasta que esté suave. Agrega 4 dientes de ajo picaditos, ¼ a ½ cdta de hojuelas de pimienta roja y 1 taza de pasta de tomate. Cocina removiendo por 3 a 4 minutos, hasta que la pasta de tomate se torne color ladrillo y comience a caramelizarse.
Agrega ½ taza de vodka y remueve mientras se evapora casi por completo, unos 2 minutos. Luego añade 1 ½ tazas de crema de leche y un chorrito del agua de cocción de la pasta. Mezcla bien y agrega 4 oz de queso parmesano rallado.
Agrega la pasta cocida (1 libra), mezcla todo hasta que se forme una salsa cremosa. Si necesitas, añade más del agua de cocción (de la taza que reservaste) hasta que todo quede bien jugoso y se te pegue en el alma.
Terminas con albahaca picadita y un poco más de parmesano por arriba.