Pesto de albahaca y almendra
Tener pesto en la nevera significa que puedes tener una comida deliciosa en 10 minutos. El pesto puede elevar el plato más simple, desde una pasta, un sandwich, una carne, pollo, pescado… ¡Lo que se te ocurra! 🤤
Hago este pesto con almendras en vez de piñones (como manda la tradición genovesa) porque los piñones suelen tener un precio bastante elevado y las almendras nos dan ese toque nutty sin rompernos el bolsillo, porque tenemos que guardar para #lospañalesdesanti. 😅
Para hacer este pesto recomiendo tostar las almendras porque ayuda a que el sabor a nuez de destaca más y le da un toque ahumado que diferenciará tu pesto de cualquier otro (no es obligatorio si andas un poco rápido, créeme que sabe super rico igual).
También algo super importante es que no “tiramos” todo junto en el procesador, sino que dejamos la albahaca de último ya que es una hierba delicada podrémos tener un pesto más vibrante y con sabor más puro a albahaca si no la maltratamos tanto con la cuchilla cuando se estén moliendo las almendras. Además, ayuda a que el verde quede MÁS verde y, bueno, yo no sé ustedes pero yo como con los ojos. 🤩
Qué:
1/2 taza de hojas de albahaca
20 almendras
2 dientes de ajo
1/2 taza aceite de oliva
50 g o 1/2 taza de parmesano rayado
Sal y pimienta
Opcional: un chorrito de limón
Cómo:
En un procesador de alimentos o en la licuadora, coloca las almendras, los dientes de ajo sin piel, una pizca de sal y de pimienta y la mitad del aceite de oliva. Procesa hasta obtener un puré y añade entonces la albahaca y el queso parmesano. Vuelve a procesar, pero sin exceder. Ve agregando el resto del aceite de oliva poco a poco hasta que tenga la consistencia que deseas. Agrega el chorrito de limón y prueba para corregir sal y pimienta.
Opcional: tuesta las almendras en una sartén con un poco de aceite de oliva por 1-2 minutos antes de procesarlas.
